El sensor de ocupación cama/sillón está diseñado para generar alarmas de forma automática si la persona usuaria no se ha ido a la cama o no se ha levantado de ella a la hora predeterminada; y si se levanta de la cama durante la noche y no regresa a ella en un periodo de tiempo predeterminado.
Se puede configurar a medida según las actividades diarias específicas de cada persona. Además, existe una función opcional para encender de forma automática una o varias luces como, por ejemplo, las del dormitorio principal, pasillo y baño, minimizando el riesgo de caída de una persona que se levante por la noche.
Está pensado para personas que acaban de salir del hospital y necesitan ayuda en su domicilio; personas mayores, enfermas y con discapacidad; personas con movilidad reducida; y personas que estén tomando medicamentos.
Consta de una almohadilla de presión, que se coloca debajo de la sábana bajera de la cama de la persona usuaria. Conectada a una unidad domiciliaria de Tunstall, generará una alarma en cualquiera de los tres supuestos anteriores.
El sensor de ocupación de sillón funciona de la misma forma. La almohadilla se coloca en el asiento del sillón o silla en la que se sienta habitualmente. También puede resultar de gran utilidad para personas con discapacidad que habitualmente utilizan sillas de ruedas.